viernes, 11 de noviembre de 2011

Los capullos

Eres un capullo,
Y no de una flor,
Que si así fuera
Te pondría en un jarrón.

Te regaría en la mañana
Echándote agua a placer.
Así no te reirías de mí
Cuando no sé lo que hacer

Con este otro capullo
Que de ordenador tienes,
Que sabiéndome enganchada
Se me ríe cuando quiere.

Anunciándome en pantalla:
“el programa en suspensión,
que todo puede ir al traste
por cometer un error”.

Yo intento arreglar el fallo
Y él no obedece mis órdenes,
Que el ratón se ha escapado
Y en la ratonera se esconde.

Yo también me escondo
De la vista de este trasto
Que me da dolor de cuello
Cuando lo he manejado un rato.

Ahora estoy a la espera
De que tú, mi capullo, llegues,
Que arregles los errores
Que mi inexperta mano comete.